Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré;  de manera que podemos decir confiadamente: El Señor es mi ayudador; no temeré Lo que me pueda hacer el hombre. Hebreos 13:5‭,6

La riqueza la encontramos en todo nuestro entorno, hay quienes acumulan riqueza material, hay quienes la buscan espiritual. Aún en lo material debemos ser felices con lo que tenemos y no esperar hasta tener una condición deseada para alcanzar la felicidad. ¿Quién es verdaderamente rico? será aquel que no le falta nada; el que llega a casa a ver su pantalla de 50″ después de una jornada de trabajo y come todo lo que quiera; o el que viaja por el mundo en asientos de lujo y hospedándose en los mejores hoteles; o tal vez el que tiene el mejor celular, los mejores zapatos y dispone de dinero con solo meter su tarjeta en el cajero? ¿Cómo describimos hoy la riqueza?

Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto. 1 Timoteo 6:8

Las bendiciones de Dios se identifican cada día, las renueva con la intención que nos demos cuenta de su gran misericordia. 

Es por la misericordia de Jehová que no somos consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad. Lamentaciones 3:22,23

Si hay protección en nuestra vida y nada malo nos pasa, no pasemos por alto el reconocer a quién le debemos ese cuidado. 

El que es verdaderamente rico es el que agradece y es feliz con lo que tiene, no por conformismo, sino porque dentro de sí ha encontrado que las circunstancias no interfieren en el estado de su alma y de su espíritu, alguien que encuentra esto irradia felicidad y puede contagiar a los que están en su entorno. 

El corazón alegre hermosea el rostro: Mas por el dolor de corazón el espíritu se abate. Proverbios 15:13

Un corazón alegre es un corazón agradecido. Somos afortunados de no creer que todo es obra de la casualidad, ya que cada evento en nuestra vida tiene un propósito, ser mejores y no estar angustiados por el ¿qué comeremos, qué beberemos o dónde dormiremos? (Mateo 6:31-33).

Estos días ayudan a trabajar aspectos que en una vida ajetreada y llena de actividades, difícilmente lo podríamos hacer. Pero estar conscientes de lo afortunados que somos es algo digno de trabajar. 

Porque Jehová toma contentamiento con su pueblo: Hermoseará á los humildes con salud. Salmos 149:4

Es una recompensa saber que somos ricos por todo lo que Dios nos da y no por lo que podemos obtener de forma material. Así que agradezcamos en estos días por la bendición de Dios, que renueva para que obtengamos la posibilidad de ser ricos y tener abundancia en nuestros hogares. 

Porque si primero hay la voluntad dispuesta, será acepta según lo que uno tiene, no según lo que no tiene. 2 Corintios 8:12

Con la pura voluntad de entregarle agradecimiento a Dios con lo que poseemos, somos ricos y afortunados porque Dios está en nuestras vidas. 

Recommended Posts