“Porque nosotros, coadjutores somos de Dios; y vosotros labranza de Dios sois, edificio de Dios sois. ” (1ª. Corintios 3: 9)
El apóstol Pablo nos dá una hermosa enseñanza al decir que somos EDIFICIO DE DIOS (1ª. Corintios 3:9,10). Esta enseñanza la podemos obtener comparando lo material con lo espiritual. Cuando vamos a construir un edificio, necesitamos primero de un Perito arquitecto que nos guiará en la construcción, indicándonos la forma en que han de colocarse los elementos propios de una construcción. Ya una vez sabiendo cómo hemos de edificar entendemos que lo esencial es poner los cimientos que servirán para que nuestro edificio esté firme, pues Jesús dijo que no debíamos construir sobre la arena, porque con la lluvia y los vientos aquella casa puede derrumbarse (Mateo 7:26,27), por lo tanto, todo edificio o construcción necesita de un fundamento.
Continue reading